Reto del proyecto
Un auditorio de tecnología tan avanzada y de estética tan cuidada debía equiparse igualmente de asientos de última generación y de diseño innovador. Para Figueras, el reto del proyecto consistió en conseguir conjugar la máxima optimización del espacio disponible en el interior del teatro con el uso de una butaca de amplias dimensiones y diseño elegante como es la Smart 13010 de Figueras.
Para respetar tanto el espacio diseñado por los arquitectos como el modelo de asiento escogido por la propiedad, el equipo técnico de Figueras tuvo que adaptar la butaca Smart y crear cuatro tipos diferentes, con distintas distancias entre-ejes. De este modo, se encajaron perfectamente las 600 butacas en el espacio, creando una sala uniforme y armoniosa. Además, diez de las butacas son completamente removibles para que, en su lugar, se pueda montar una tarima donde ubicar los equipos de grabación pertinentes en caso de ser necesaria la grabación del espectáculo. Toda la instalación observa, además, la estricta normativa estadounidense en lo referente a adaptación de la sala a personas con movilidad reducida. En cinco de las filas, la primera butaca de pasillo se realizó con el sistema transfer arm, el cual, sin afectar a la estética de la butaca, permite un acceso cómodo abriéndose el lateral.
Producto suministrado
El teatro ha sido equipado con 595 butacas Figueras del modelo Smart 13010, tapizadas en un elegante rojo burdeos. Se trata de una butaca modular de alto confort y generosas dimensiones que ha sido especialmente diseñada para su uso en salas corporativas premium. Las butacas están dispuestas de forma que los espectadores puedan acceder a sus asientos de forma cómoda y sin molestar al resto de espectadores.
Figueras tuvo en cuenta hasta los más mínimos detalles de este asiento. Tal es el caso de las luces que se encuentran en las butacas de final de cada fila para iluminar los pasillos, cuyo foco de luz está graduado de forma que no pueda interferir en la calidad de las grabaciones que se produzcan en la sala. Para lograr la mejor optimización del espacio, Figueras realizó cuatro versiones del mismo modelo, con entre-ejes diferentes para conseguir filas uniformes y armoniosas.