Los prestigiosos arquitectos Jordi Bosch Genover, Manel Bosch i Aragó y Joan Tarrús Galter se unieron para diseñar y crear un espacio con múltiples espacios funcionales donde la música, los congresos y las actividades feriales conviven en perfecta armonía.
El edificio, de líneas geométricas puras, consta de una planta sótano y tres pisos de altura y está orientado al río y al Parque de la Devesa, dando protagonismo al paisaje que lo rodea.
Para equipar las salas de mayor capacidad se eligió la butaca Flex 6036 y diferentes accesorios para adaptarlos a las necesidades de cada espacio, manteniendo siempre la estética del acabado en madera a juego con el tapizado en negro.
La Sala Montsalvatge, con capacidad para 1.236 personas, se diseñó para albergar la actividad sinfónica del equipamiento y cumple con los exigentes requisitos acústicos de una sala de conciertos, pero también es un gran auditorio que puede adaptarse perfectamente a congresos de gran formato.
La Sala de Cambra, diseñada para albergar actividades de menor capacidad, aumenta su funcionalidad al incorporar un atril integrado en el panel lateral de la butaca. Con un aforo de hasta 362 plazas, es la sala perfecta para conciertos de cámara, pero también para conferencias, congresos o clases magistrales.
En la Sala Petita, las 178 butacas se instalaron junto con la mesa F48, una combinación perfecta para todo tipo de eventos como conferencias, congresos y largas sesiones de trabajo.